Mejorar la imagen del empresario familiar en España
Hace unos días se ha celebrado la cita anual más importante de las empresas familiares en España. El 21 Congreso Nacional de Empresa Familiar, organizado por el Instituto de la Empresa Familiar.
El 21 Congreso Nacional de Empresa Familiar se celebró en Valencia y al mismo han acudido 700 empresarios familiares de nuestro país.
Este año, el Congreso ha girado en torno a un lema “comprometidos con el futuro” y un tema, la necesidad de mejorar la imagen social de los empresarios (familiares) en España. Los empresarios familiares son generadores de riqueza, empleo y bienestar social, y lo hacen a pesar de las incertidumbres creadas por otros, básicamente desde la esfera política.
Muy claro fue Juan Roig, presidente de Mercadona, al recordar que las empresas necesitan el beneficio pero no es su objetivo esencial. El beneficio, según Roig, es como comer para los seres humanos, algo necesario para vivir, aunque no vivimos para comer. Mercadona tiene como propósito satisfacer las necesidades de sus clientes y las de sus empleados, proveedores y el resto de la sociedad. En definitiva, Roig destacó el compromiso de su empresa con el futuro de la sociedad.
Pero Roig fue más lejos y, de acuerdo con el nuevo mantra del IEF, subrayó que es necesario mejorar la reputación social de los empresarios en nuestro país y para ello, éstos deben salir a los medios de comunicación y explicar lo que hacen. En las tertulias de televisión otros hablan de los empresarios pero nadie sale a hablar por ellos. En España, los empresarios no suelen aparecer en los medios y eso les perjudica. Lo expresó muy claramente Roig, los empresarios deben “salir del armario” y estar presentes en los medios.
Solo unas horas más tarde, en la tertulia sobre el papel de las empresas familiares durante la crisis, Simón Pedro Barceló (Grupo Barceló) reiteró el mensaje. Los empresarios deben hacer oír su voz y explicar a la sociedad que en buena medida el sector público vive gracias al valor que genera el sector privado. Simón Pedro reconoció a su vez que, previamente, los empresarios deben aumentar su nivel de auto-exigencia ética.
En la misma tertulia, José Manuel Entrecanales (Acciona) denunció que muchos de los representantes empresariales (aludiendo a las patronales) están dirigidas por personas que no les representan y que ni siquiera son empresarios, de ahí la necesidad de ser ellos mismos quienes den la cara, ellos que si son empresarios reconocidos y de éxito.
Entrecanales incluso instó a sus colegas a adentrase en la política una vez que dejen la primera línea en la empresa, con el fin de servir a la sociedad, aunque el propio Barceló, que en su juventud fue senador reconoció que si algo tuviese que eliminar de su trayectoria sería precisamente su breve paso por la política.
Y es que en la época de la post-verdad, las redes sociales, las fake-news, etc., los empresarios han de adoptar una actitud proactiva en relación con su propia imagen y reputación, no tanto por su propio interés, que también, sino por el de una sociedad que, sin ellos, vería muy mermada su bienestar.