Adiós a la crisis: 200 empresarios españoles dan la fórmula para ser rentable y eficiente
Las empresas españolas han superado la crisis, pero ¿qué hay que hacer ahora? Hemos hablado con 200 grandes empresarios de nuestro país: esta será su hoja de ruta hasta 2025
España se encuentra en plena recuperación. A nivel general, nuestro país avanza en algunos puntos económicos y aún debe mejorar en otros más sociales, pero hay un colectivo que está diciendo adiós a la crisis que empezó en 2008: los empresarios.
Así lo avalan los datos. Según el último informe del Banco de España, las empresas de nuestro país ya finalizaron 2015 con unos niveles de rentabilidad y valoración de sus activos muy similares a los de antes de la crisis. Y en términos generales, de hecho, el PIB español actual es un 4% superior al de 2007, justo antes del estallido de la crisis global.
Nuevo objetivo: crecer, pero siendo rentables
Esta evolución, evidentemente, ha desembocado en un cambio de actitud y estrategia en las empresas españolas: «Durante la crisis, las empresas se asentaron en una cultura espartana y de búsqueda de ahorros», asegura Luis Soler Vázquez-Guillén, socio de Deloitte, pero ahora, en pleno crecimiento, «las compañías han pasado a una etapa de mejores resultados empresariales. El reto actual se centra en rediseñar y construir un nuevo edificio de eficiencia con un tipo de iniciativas que logren mantener los ratios de rentabilidad demandados por los accionistas».
Las empresas españolas, por tanto, lo tienen claro: ahora el principal objetivo es crecer, pero siempre sin olvidar que la rentabilidad y eficiencia tienen que ser una parte fundamental de su funcionamiento. Así lo desvelan los 200 empresarios españoles encuestados en el informe ‘El rediseño de la empresa del futuro. Eficiencia y rentabilidad 2025‘, realizado por Deloitte, que analiza a fondo la situación actual del tejido empresarial de nuestro país y dibuja el horizonte de expectativas y objetivos de aquí a 2025 en lo que a rentabilidad y eficiencia se refiere.
Los ocho retos de las empresas españolas
Y los nuevos escenarios, ya situados en una etapa de crecimiento y expansión, requieren nuevos retos. De aquí a 2025, las empresas españolas deberán tener ocho retos principales en toda su estrategia.
1. Innovación tecnológica constante
Ya lo dice el CEO de Oracle, Mark Hurd: «En 2025, el 80% del desarrollo de aplicaciones se hará en la nube». Si piensas que la tecnología ya nos ha dado sus mejores desarrollos, hazte a la idea de que esto no ha hecho más que empezar.
2. Alta velocidad de procesos
El sector inmobiliario ya lo ha visto de primera mano: gracias a la ingeniería avanzada y a tecnologías como el sistema BIM (Building Information Modeling), las herramientas de modelado electrónico e información de las construcciones reducirán un 50% el periodo de edificación en el futuro próximo.
3. Incertidumbre de los mercados
Las compañías tecnológicas cada vez miden más las tendencias y el impacto que pueden tener en un mercado, pero eso no nos va a librar de la incertidumbre. Si no nos crees a nosotros, escucha al fundador de Amazon, Jeff Bezos: «La mayoría de las veces tendremos que tomar la decisión solo con el 70% de la información».
4. Preocupación por la sostenibilidad y medioambiente
Pese al desarrollo y la innovación tecnológica, cada vez son más las compañías que adaptan sus estrategias y modelos de negocio a un mundo sostenible y eficiente a nivel medioambiental. Las empresas que no incluyan ese elemento en la ecuación se verán en serios problemas.
5. Aumento de las enfermedades psicológicas
Los empleados no son robots, sino personas. Y como tales, conviene tenerlos satisfechos en su puesto de trabajo. Un trabajador descontento o deprimido no solo será un fracaso social, sino también una pésima noticia para la empresa en cuestión.
6. Mayor carga regulatoria
La innovación tecnológica siempre trae consigo un ineludible compañero de viaje: la carga regulatoria. Cualquier empresa debe tenerlo en cuenta. Si va a innovar, deberá incluir las gestiones burocráticas en su estrategia y presupuestos.
7. Gap digital en la población
Tendemos a pensar que todos estamos altamente tecnologizados, pero ni mucho menos es así: según Eurostat, en diciembre de 2016 el 18% de los hogares y el 17% de los españoles no accedían nunca a internet. Conviene tener en cuenta esa brecha a la hora de desarrollar tecnología.
8. Irrupción de los ‘millennials’
En el año 2020, los ‘millennials’ ocuparán el 35% de la fuerza laboral en todo el mundo. Si crees que no es necesario analizar, comprender y seducir a esta nueva generación, antes o después tendrás problemas.
Las cuatro claves del futuro
Los retos se definen solos, pero siempre han de ejecutarse conforme a una estrategia de funcionamiento clara. Según el informe de Deloitte, hay cuatro factores que marcarán la nueva estrategia de las empresas españolas de aquí a 2025.
1. Nuevos modelos de negocio
Según los 200 CEO españoles consultados, el 70% de las empresas creará productos donde la personalización en el último momento será lo más importante. Esto abrirá la puerta del negocio logístico, según el 88% de los entrevistados. Además, la mitad cree que la venta de productos va a perder valor debido al auge de la economía colaborativa, que otorga más importancia al pago por disfrute que al pago por la mera propiedad.
2. Industria 4.0
El entorno digital ya no es una opción, sino una obligación que ha tocado a todas las industrias. Así, el 90% de los encuestados considera que la digitalización transformará como mínimo el 20% de su empresa. Esto se une al desarrollo de la tecnología disruptiva (‘cloud computing’, Blockchain, ‘genomics’ o internet de las cosas) y tiene una consecuencia clara: el 70% de los encuestados cree que en 2025 la robotización habrá afectado, como poco, al 10% de las tareas desarrolladas por las empresas.
3. El empleado, en el centro
En 2025, el 91% de las empresas demandará los llamados empleados tipo T: profesionales con formación técnica especializada para desarrollar un puesto de trabajo, pero que, en paralelo, cuentan con aptitudes y habilidades genéricas y transversales como capacidad de comunicación, perseverancia, liderazgo, posibilidad de trabajo en equipo, empatía y capacidad de resolución de conflictos, entre otras. Además, estos perfiles facilitarán la formación de equipos multidisciplinares para proyectos de innovación en empresas que, según el 98% de los CEO, irán potenciando el teletrabajo entre sus empleados.
4. Cercanía con el cliente
Avanzamos hacia una época en que los clientes estarán más empoderados que nunca, según el 86% de los encuestados. Por ello, la distribución omnicanal y multicanal será el modelo predominante, según el 91% de los CEO.
El futuro, en definitiva, pinta claro. Según Luis Soler, socio de Deloitte, «las perspectivas del mercado son buenas y los índices de crecimiento son alentadores, pero muchos CEO no quieren olvidar las recetas de éxito de la crisis: rentabilidad, eficiencia y sostenibilidad del negocio. A muchos les preocupa cómo integrar las nuevas tendencias, tecnologías, nuevos modelos de gestión del talento y disrupciones de modelos de negocio sin perder o al menos controlar los índices de rentabilidad y eficiencia que demandan los accionistas». La fórmula, por tanto, está clara; ahora solo falta ejecutarla.
Fuente: ElConfidencial