Persán fabrica detergente para Amazon en Europa
La empresa sevillana facturó 292 millones el año pasado, un 40% en el exterior
Persán pisa el acelerador en el mercado internacional tras culminar su plan de renovación y desarrollo tecnológico, que ha supuesto una inversión de 66 millones de euros. El fabricante de detergentes y suavizantes presidido por José Moya capta ya el 40% de su negocio en el exterior —tras incrementar un 10% sus ventas fuera de España en 2018— y anuncia un plan de expansión internacional a partir de este año y hasta 2023.
En concreto, de una facturación global de 292 millones de euros el pasado año, alrededor de 116 millones corresponden al negocio generado en otros mercados europeos. «Esto supone un paso importante en su objetivo actual de consolidación entre los primeros fabricantes del continente», subraya la compañía en un comunicado.
Las ventas de Persán crecieron tanto en su mercado tradicional en Europa occidental, sobre todo en el Reino Unido, Francia, Italia y Países Bajos, como en Europa del Este, especialmente en Polonia, donde mantiene un contrato de asistencia técnica para una fábrica local, en la que ha realizado un proyecto de transformación radical, tanto de su tecnología como de sus productos.
Junto a ello, la empresa considera «muy destacable» su entrada en el campo de los distribuidores online, ya que el fabricante sevillano se ha convertido en proveedor de Amazon y fabrica su marca para toda Europa. La nueva línea de producción para el gigante mundial del comercio electrónico le ha abierto un inmenso canal de ventas.
Nuevas alianzas
A partir de este año, la compañía sevillana iniciará un plan quinquenal de expansión internacional, que centra el crecimiento en alianzas con nuevos clientes y en la ampliación de las actuales. «Esto supondrá la presencia industrial en otros países y la entrada en nuevas categorías de producto, como limpiadores especialistas para el hogar y el aseo y cuidado personal», avanza la empresa sevillana.
Persán sigue siendo el líder del sector del detergente en el mercado español, donde Mercadona se mantiene como su principal cliente. Las ventas de la compañía en 2018 descendieron un 5,6%, debido al menor peso en la cadena de supermercados por la entrada de nuevos operadores, dentro de la nueva filosofía de la marca de distribución valenciana con sus proveedores. Pese a este descenso de la facturación, Persán incrementó su ebitda (resultado bruto de explotación) un 16,1% el año pasado, hasta los 19,5 millones de euros.
El pasado ejercicio, la compañía culminó su plan de renovación y desarrollo tecnológico 2013-2018, que ha supuesto una inversión de 66 millones de euros. Durante ese periodo, Persán ha puesto en marcha un almacén automático de 40.000 palés y nuevas líneas de envasado, entre las que destacan las cápsulas mixtas de polvo y líquido, en las que su tecnología es pionera.
También ha construido un nuevo laboratorio de I+D+i en el que trabajan más de 70 especialistas, y puesto en marcha un innovador laboratorio de marketing, donde investiga y analiza con consumidores las tendencias del mercado.
Asímismo, la empresa de la familia Moya Yoldi adquirió tres hectáreas sobre los terrenos colindantes a la fábrica que tiene en Sevilla, lo que permitirá la ampliación de sus actuales instalaciones. Ello fue posible gracias a una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Sevilla que fue aprobado por el Ayuntamiento hispalense en abril del año pasado.
Por otro lado, José Moya inició el proceso de relevo generacional en Persán hace cuatro años, tras situar a la compañía como un líder europeo en la fabricación de detergentes. El directivo Antonio Somé es el primer ejecutivo de la firma, mientras que Javier Moya Yoldi asumió la dirección de compras y operaciones y Juan Moya Yoldi la dirección financiera y de sistemas.
Fuente: ABC de Sevilla