Cuando una persona contacta con una entidad protectora, puede traer expectativas muy diferentes. Algunas personas traerán intención de ayudar en cualquier labor que se le pueda asignar, mientras que otras tendrán expectativas más concretas -ayudar en rescates, ser casa de acogida, ayudar a captar fondos, hacer labor administrativa o veterinaria, etc.-
Sin embargo, hay mucho que preparar antes de empezar con la labor. Aunque la mayor parte de las entidades de mayor tamaño ya disponen de planes de voluntariado específicos, puede ser interesante para las entidades de menor tamaño encontrar alguna información inicial sobre cómo gestionar estos programas de incorporación de voluntariado.
Con esta vocación, reunimos los siguientes contenidos :