Matemáticos del IMI junto con un equipo de veterinarios desarrollan un modelo para simular el movimiento de mosquitos y controlar la Lengua Azul

Matemáticos del IMI junto con un equipo de veterinarios desarrollan un modelo para simular el movimiento de mosquitos y controlar la Lengua Azul

Un grupo de investigadores del Instituto de Matemática Interdisciplinar (IMI) junto con veterinarios VISAVET y UC Davis han desarrollado un modelo que permite evaluar el riesgo de entrada de mosquitos transmisores de la lengua azul en la península.

El cambio climático propicia la dispersión de nuevos insectos desde África hasta nuestras latitudes. Estos insectos pueden ser a veces portadores de importantes patógenos, entre los que se encuentra el Virus de la Lengua Azul, una enfermedad que afecta a los rumiantes, en especial al ganado ovino.

Un grupo de investigadores del Instituto de Matemática Interdisciplinar (IMI) junto con veterinarios VISAVET y UC Davis han desarrollado un modelo que permite evaluar el riesgo de entrada del mosquito Culicoides, transmisor de la Lengua Azul, en la península. El modelo analiza la temperatura y las corrientes de aire que permiten el movimiento y la supervivencia de los insectos. De esta forma se puede trazar un mapa epidemiológico que predice la densidad numérica de los insectos introducidos a lo largo del tiempo basándose en 3 factores:

    • Movimiento asociado a las corrientes de aire
    • Precipitación en el suelo
    • Supervivencia gracias a las condiciones climáticas

En España, se han producido brotes de la Enfermedad de la Lengua Azul en ovino desde 2004 y numerosos expertos señalan la llegada del mosquito Culicoides desde el Norte de África como su posible causa.

Gracias a la aplicación del modelo en España, se ha establecido una relación entre la llegada del mosquito Culicoides desde el Norte de África (transportado por el viento), especialmente entre junio y noviembre, y los brotes de Lengua Azul detectados en el sur y este de España este año.

Este modelo de predicción podría ser una herramienta de monitorización muy útil para el control de patógenos importantes transmitidos por insectos y que tienen un fuerte impacto en la producción ganadera.

Información del estudio

Elena Portillo
acti-imus@us.es

Contacto para prensa y servicios de divulgación científica.

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